Al leer Coronavirus (COVID-19) no somos extraños a lo que este nombre y denominación significa. Nos trae a la mente China y la ciudad de Wuhan de la cual esta última, no habíamos oído hasta ahora; lo cierto es que la humanidad enfrenta de manera única en su historia, esta crisis y es a nivel global ¿Qué esperar?.
1. Un enemigo que lo cambió todo
Los países y sus respectivos gobiernos, responden a un enemigo que no estaba contemplado en ningún horizonte, el ataque llegó de un organismo microscópico.
Esta pandemia está reescribiendo la vida como la conocíamos antes, en al menos 4 aspectos:
- Sistemas de salud.
- La economía.
- La política.
- La sociedad en conjunto.
2. Los frentes contra la pandemia
Frente a la crisis , gobiernos buscan combatir el avance del COVID-19, pero mientras esto sucede, se observan dos frentes importantes que toman decisiones vitales:
Los gobiernos
Procurando una adecuada administración de los recursos del estado , inyectando fondos y normalizando la ayuda para superar la crisis sanitaria (130,469 muertes hasta el momento). Creando oportunidades de «salvamento» buscando que la economía se afecte lo menos posible y poder pasar la ola para navegar después.
Los costos humanos de la pandemia de Coronavirus ya son inconmensurables y todos los países necesitan trabajar juntos para proteger a las personas y limitar el daño económico
FMI (FONDO MONETARIO INTERNACIONAL)
La sociedad
En otra linea de batalla, decidiendo a diario a fin de superar, desde el núcleo del hogar, las problemáticas económicas, familiares y de salud .
Pero complementaria a las decisiones diarias, existe una pregunta que necesitamos plantearnos, si todo cambió: ¿Estamos listos para este nuevo mundo ?.
Tal vez no sea este el momento adecuado para idealizar el futuro, por el contrario, es momento de construirlo. Las decisiones que tomamos afectan inmediatamente nuestro desempeño.
Las crisis o emergencias entre los muchos efectos que generan , también aceleran los procesos de un país. Las decisiones que antes pudieran extenderse a razón de análisis, prioridades o burocracia, ahora toman días ejecutarlas, como viene siendo el caso en : Tecnología.
3. Visitas del futuro
Tecnologías que se observaban cómo posibilidades a largo plazo para satisfacer necesidades en un mundo futurista , son puestas a prueba “en caliente” por diferentes gobiernos.
Tal es el caso de China que usando terminales móviles permiten a la población registros de temperatura, por medio de los sensores dactilares. Logrando detectar casos de posibles infectados y tomar las medidas sanitarias adecuadas , así mismo contactar a los posibles infectados.
Mientras que por el lado americano Google y Facebook dialogan para presentar una solución basada en sus plataformas. Esto lograría acceso al desplazamiento de personas, tendencias y pruebas de descarte en voluntarios.
4. Una mirada al interior
Pero mientras los gobiernos experimentan en tecnología, de manera similar las empresas, que son el corazón financiero y económico de los países, atraviesan su prueba más compleja, viendo en la tecnología la respuesta a los principales problemas coyunturales.
El FMI proyecta que la tasa de desempleo llegue a 7.1% en el Perú, en el marco del impacto negativo por el COVID-19 en el mundo. La estimación para el 2021 seria de 7.3%. Similar suerte ocurre con el resto de los países de la región.
Es importante señalar que la informática y las telecomunicaciones se constituyen como uno de los principales paradigmas a ser aplicados por las organizaciones a fin de mantener sus operaciones y con ello dar el siguiente paso evolutivo de las empresas en un mundo post pandemia.
Se postulan soluciones como teletrabajo, capacitaciones a distancia y hasta reclutamiento a distancia, junto con un nuevo marco regulatorio que llegara mas temprano que tarde , así poder implementar los nuevos modelos empresariales.
5. Luego de la crisis ¿Qué esperar?
La tierra después del COVID-19 será diferente a la que conocíamos, esta crisis es a nivel global ¿Qué esperar?. Nos ofrecerá nuevas posibilidades de crecimiento pero también nuevos retos, muy diferentes y con mayor frecuencia. Tal vez uno de los mas importantes será la adaptación para continuar y seguir; reinventar la manera como nos comunicábamos, como trabajábamos y como concebíamos ser ciudadanos.